Introducción: Pavol Lupták es un hacker ético y CEO de Nethemba, una empresa de seguridad informática. Además de eso, también es un viajero perpetuo y fundador de Paralelni Polis en Praga y Bratislava. Fue uno de los primeros en adoptar Bitcoin, un defensor de la privacidad durante mucho tiempo y un destacado evangelista de criptomonedas que difundió el mensaje de Cypherpunk en todo el mundo.
En esta entrevista, Pavol comparte David Stancel de Coin Story su punto de vista e ideas sobre el espacio criptográfico: cómo comenzó todo para él y cómo se ha desarrollado con el tiempo.
David Stancel: Has estado en el espacio mucho tiempo, ¿recuerdas cómo descubriste Bitcoin por primera vez y cuál fue tu reacción?
Lo recuerdo bien. Junto con Juraj Bednár en nuestro hackerspace Progressbar de Bratislava, acabamos de descubrir que íbamos a dar unas presentaciones. Nos entusiasmó mucho el primer lugar de dark market: el Silk Road. Juraj dio su primera presentación sobre Bitcoin, y yo la primera sobre la criptoanarquía y sus consecuencias para nuestra sociedad.
Para ser sinceros, Bitcoin nos fascinó, y también fue una razón por la que visitamos la primera conferencia de Bitcoin en Praga en 2010 y luego la segunda en Londres organizada por Amir Taaki. Unos meses después, invitamos a un entusiasta de Bitcoin muy joven: Vitalik Buterin, quien brindó una breve presentación sobre Bitcoin multi-sig.
DS: ¿Cómo ha evolucionado tu opinión sobre Bitcoin desde entonces?
En Bitcoin aprecié especialmente la descentralización total, la imposibilidad de que el gobierno lo cierre y la adopción prácticamente inmediata del dark market. Fue la razón principal del impulso global del dark market.
Me entusiasmó el hecho de que gracias a portales como el mercado Silk Road, casi un millón de personas podían hacer negocios completamente fuera del control del gobierno. Considero que este es el mayor desafío de Bitcoin en sus comienzos.
Desafortunadamente, nunca he percibido Bitcoin como una inversión, sino siempre como una herramienta de liberación. Ignorando el efecto de red de Bitcoin, después del cierre de muchos mercados oscuros, debido a la falta de privacidad suficiente, ya que Bitcoin es una criptomoneda pseudo-anónima, no realmente anónima, vendí todos mis Bitcoins por un precio ridículo. Comencé a enfocarme en criptomonedas más conscientes de la privacidad como Monero.
Si me arrepiento de algo en mi vida, es de esta decisión.
Todavía sigo usando Bitcoin como moneda de operación porque tiene la liquidez más significativa.
Las billeteras de privacidad como Wasabi o Samurai, el enrutamiento de cebolla en Bitcoin Lightning, aumentan mucho la privacidad de Bitcoin. Sin embargo, todavía percibo que estos intentos son soluciones temporales y espero que Bitcoin sea una criptomoneda más privada. Entonces podré usarlo más a menudo.
DS: ¿Cuál fue su opinión sobre el debate sobre el tamaño del bloque?
¿Queremos un tamaño de bloque más pequeño con mejor descentralización y seguridad? ¿O queremos lo contrario, menos descentralización, pero mejor rendimiento?
No sé, las personas tienen preferencias diferentes, y son importantes.
Creo que es solo una cuestión de tiempo cuando para que un mercado competitivo responda esta pregunta.
DS: Eres un criptoanarquista de corazón. ¿Qué significa ser un criptoanarquista para ti?
La privacidad es una parte inevitable de mi vida.
Creo que todos pueden pedir más privacidad, rechazando cualquier intervención de terceros al mismo tiempo. Tengo un problema mental con la propaganda populista del estado de que es necesario intercambiar nuestra privacidad con más seguridad. Desafortunadamente, presenciamos cómo nuestra libertad y privacidad se reducen todo el tiempo, citando amenazas terroristas ficticias. Sin ningún motivo real nos estamos convirtiendo en víctimas de la vigilancia global financiera.
Vivo la vida de un criptoanarquista. Dejé de usar cuentas bancarias personales, transfirí mis ahorros a Monero, inventé muchas formas de eludir las regulaciones draconianas de KYC / AML, pasé los últimos años para descubrir cómo es posible darse de baja del sistema.
Todavía creo que la tecnología criptográfica, incluidas las monedas criptográficas, puede proporcionarnos más libertad personal y económica que nunca habíamos imaginado. Aunque todos los estados intentan matar nuestra privacidad financiera mediante una vigilancia financiera global masiva y prohibiendo el efectivo.
DS: ¿Cómo explicas que el movimiento Cypherpunks pereció? ¿Ves algún sucesor?
El movimiento Cypherpunk surgió del entusiasmo de algunos geeks individuales que se dieron cuenta del enorme impacto de las tecnologías criptográficas en nuestra sociedad. Por ejemplo, la primera implementación del cifrado asimétrico llamada PGP fue una gran cosa. Timothy C. May fue un gran visionario, describiendo sus sueños cypherpunk en Cyphernomicon y el manifiesto criptoanarquista.
Y como cualquier entusiasmo, este también desapareció después de unos años cuando muchos cypherpunks consiguieron un buen trabajo y se hicieron mayores.
Pero no desapareció por completo. El lanzamiento de Bitcoin fue un regalo especial para la antigua comunidad de cypherpunk, que impulsó nuevos movimientos relacionados en todo el mundo: en Europa Central, fue Polis Paralela.
DS: ¿Cómo ves un choque quizás inevitable entre la criptoanarquía y los estados-nación?
Lo percibo como un choque de paradigmas. En los últimos años, podemos observar un conflicto significativo de un paradigma centralizado (los gobiernos, los estados, los bancos centrales) con el descentralizado: Internet, las criptomonedas y las tecnologías descentralizadas.
Las instituciones centralizadas como los gobiernos y los bancos están tratando de hacer cumplir sus reglas a las tecnologías descentralizadas. Esto no sólo no funciona, sino que siempre paraliza una nueva tecnología.
Desafortunadamente, esto ya sucedió muchas veces en nuestra historia, por ejemplo, las leyes de tráfico de bandera roja, que eran la obligación de que una persona que agite una bandera roja cuando circulaba en automóvil para advertir al público que los vehículos no son seguros. Esto es muy similar a las regulaciones obsesivas actuales que muestran que traficantes de drogas, terroristas y estafadores usan criptomonedas.
¿Piensas que las leyes de tráfico de bandera roja son obsoletas? Entonces, apoyar la conformidad de un paradigma descentralizado con el paradigma centralizado, el estado, tampoco tiene mucho sentido. De la misma forma que es imposible criar y mejorar caballos para competir con los automóviles, nunca se podrá regular centralmente ninguna tecnología diseñada para ser descentralizada, anónima y, por lo tanto, no regulable.
DS: Las criptomonedas crearon un sistema financiero paralelo: ¿cree que llegaremos a un punto en el que los gobiernos dirán que se rinden, admitiendo que no pueden luchar contra él?
Los gobiernos no suelen admitir sus fallas, por eso son gobiernos. No conozco ningún gobierno en el mundo que haya revelado públicamente que mienten sobre algo.
El escenario más probable es que en una compleja sociedad de alta tecnología entre pares después de algún tiempo, ya no los necesitemos, y se volverán obsoletos como pasa con la mayoría de las tecnologías.
Creo que algo como «Uber descentralizado para todo» puede ser un gran cambio.
Si una aplicación «perfecta» puede satisfacer casi todos los deseos de todas las personas y conectar a todas las personas de acuerdo con sus necesidades permitiendo que cualquiera ofrezca algo, entonces ya no necesitaremos al gobierno central.
Una economía descentralizada digital punto a punto con costos de transacción mínimos reemplazará el monopolio gigantesco ineficiente del último milenio.
DS: ¿Eres optimista en el sentido de que las personas podrán proteger sus libertades y privacidad en el espacio digital?
Soy muy pesimista sobre las próximas regulaciones mundiales dictatoriales, como la vigilancia financiera integral, un sistema de puntuación que podemos ver en China ahora.
Pero soy muy optimista sobre las nuevas tecnologías de liberación que no piden permiso, como Bitcoin, y su impacto en nuestra vida.
Los gobiernos nos quitan continuamente la libertad. Las tecnologías de la liberación nos abren horizontes completamente nuevos que no podíamos imaginar antes.
Ambas cosas están sucediendo al mismo tiempo.
DS: ¿Cuál es el peor de los escenarios que puedes imaginar respecto de los gobiernos censurando a al mundo cripto? ¿Qué tan probable cree que sea un escenario así?
Creo que los gobiernos pueden hacer prácticamente cualquier cosa. En el peor de los casos, pueden prohibir las criptomonedas y criminalizar a todas las personas que comercian o se involucran con las criptomonedas. No olvidemos que esto ya sucedió con el oro hace unas décadas con el oro en el país «más libre»: Estados Unidos.
Pero, por supuesto, la pregunta crítica es qué tan efectivamente podrían hacer cumplir esta prohibición. Sin una vigilancia completa de todas las personas, no sería posible.
¿Sacrificaremos nuestros últimos restos de privacidad para una sociedad finalmente «segura»?
¿Se cumplirá la peor visión de Timothy C May sobre los cuatro caballos del apocalipsis digital de información?
No tengo idea de cuán probable es este escenario: la dictadura digital ya está aquí, simplemente no está distribuida uniformemente.
DS: ¿Cómo podemos evitar la vigilancia de los estados nacionales? ¿Cuáles son las mejores herramientas?
¡Utiliza criptomonedas verdaderamente anónimas como Monero, por supuesto!
Cifra toda nuestra comunicación usando, por ejemplo, Signal, siga las reglas de seguridad de operación (por ejemplo.La guía OPSEC de Smuggler), construya sociedades paralelas como Paralelni Polis.
Pero en primer lugar, ten en cuenta que la vigilancia nacional es el verdadero problema.
Traducido por el Equipo de Somos Innovación gracias a la gentileza de David Stancel
Fuente: Coin Story
