El estudio reciente, encargado por Somos Innovación y llevado a cabo por Vota en Línea, revela datos fascinantes sobre las actitudes y aspiraciones de los chilenos en relación con la digitalización y la innovación. Una de las constataciones más destacadas es la actitud de los chilenos hacia la innovación. Un contundente 76 por ciento se opone a las prohibiciones o limitaciones gubernamentales en este ámbito, demostrando un respaldo robusto a la libertad en la innovación, lo que promueve la adopción de tecnologías emergentes y nuevos modelos de negocio. Además, el apoyo para la digitalización de trámites gubernamentales es abrumador. Un 92 por ciento de los encuestados se muestra a favor, sugiriendo que Chile está preparado para transitar hacia un modelo donde el gobierno actúe como servicio.
En cuanto a la Inteligencia Artificial (IA), se detecta un clima general de optimismo. A pesar de las inquietudes sobre la automatización y sus efectos en el empleo, la mayoría de los chilenos visualiza con esperanza la coexistencia con la IA en el entorno laboral. Sin embargo, es importante notar que las mujeres tienden a ser más cautelosas en su percepción sobre este tema. Por otro lado, en lo que respecta a la cultura laboral, un 31 por ciento de los chilenos ya está adoptando modelos de trabajo remoto o híbrido, lo que marca una transformación en la dinámica laboral tradicional del país. De hecho, solamente un 1 por ciento declara no estar interesado en explorar modalidades de teletrabajo.
Sin embargo, hay retos por enfrentar. Un 37 por ciento de los participantes en la encuesta siente que los líderes políticos no brindan el respaldo necesario a la innovación y la digitalización. Esta percepción subraya la necesidad de políticas más proactivas en este ámbito y podría servir como un llamado de atención para los dirigentes del país.
Los resultados de este estudio reflejan un panorama prometedor en cuanto a la receptividad y adaptabilidad de los chilenos hacia la digitalización e innovación. Estos hallazgos, sin duda, resaltan la dirección y aspiraciones de una sociedad en evolución. No obstante, también hacen un llamado a la acción para que los líderes políticos y tomadores de decisiones reconozcan y apoyen este impulso hacia el futuro. Es imperativo que se tomen medidas adecuadas para garantizar que la digitalización y la innovación no solo sean vistas con optimismo, sino que también se integren de manera efectiva en el tejido socioeconómico de Chile, beneficiando a toda la población.
